Del árbol a la mesa
La llegada de las nuevas tecnologías está cambiando a un ritmo endiablado nuestras costumbres como consumidores, tanto que cada vez nos parecemos más a pequeñas empresas cuando hacemos nuestras compras. Por ejemplo, con los alimentos está surgiendo un tipo de mercado en el que es posible contactar directamente con el productor y comprarle su producto para recibirlo en casa como recién cogido, algo que hasta cierto grado genera muchas ventajas tanto para nosotros como clientes como para el productor. Podremos un ejemplo con el servicio de naranjas a domicilio que se está imponiendo y que permitirá comprobar cómo las ventajas de esta fórmula son más que evidentes.
Ventajas para el cliente
Comprar naranjas online presenta algunas ventajas tanto en la calidad como en el precio, ya que al entrar en contacto directo con la persona que cultiva las naranjas, el pedido solo llega a casa cuando esta fruta está en temporada y es el mejor momento para cada una de las clases que se cultivan.
Las condiciones organolépticas (olor, sabor, color, etc) son las mejores en cada momento, y solo cuando estas se encuentran en ese estado estarán disponibles para su comercialización. De hecho es posible que te encuentres con que de una semana para otra esas naranjas tan ricas que te llegaron ya no estén disponibles y sea otro tipo de naranja el que se pueda comprar.
El precio es también mucho más interesante cuando se compran las naranjas así. ¿A qué se debe eso? A que al eliminar la inmensa cantidad de intermediarios que hay cuando uno compra las frutas en un supermercado, el productor puede ganar lo que considera justo sin que haya gente que marque unos precios de compra muy bajos para quienes trabajan el producto mientras ellos se embolsan una cantidad mayor, tal y como se ha demostrado en repetidas ocasiones.
Las naranjas son mejores, más baratas y además llegan a la puerta de casa en apenas un par de días, por lo que al recogerlas en su mejor momento y no tener que pasar tiempo en cámaras de maduración nos llegan en las mejores condiciones posibles.
Por estas razones muchos restaurantes ya no compran la fruta y otros productos en los mercados sino que contactan directamente con los productores a través de las páginas web de venta de naranjas a domicilio y otros muchos productos y los reciben frescos y sin aditivos, generando de este modo un valor añadido a sus preparaciones que quienes se sientan a la mesa valoran. También son muchos los particulares que empiezan a hacer la compra de este modo.
Ventajas para los productores
Que cada vez sean más los clientes que se animen a comprar naranjas online presenta a la vez grandes ventajas para los productores, tanto grandes como pequeños. Los grandes pueden crear su propia tienda en línea y vender directamente su producto sin depender de uno o varios intermediarios, y en el caso de aquellos que tengan una producción más pequeña pueden asociarse y compartir una misma tienda.
Esta fórmula de venta directa hace que no se necesite contar con una cámara en la que almacenar el producto cuando está maduro, ni tener que recolectarlo antes para que este llegue al mercado en unas condiciones más o menos aceptables. También hace que el productor sea más valorado porque la fruta es de mejor calidad al recogerse en el momento adecuado.
En cuanto a los beneficios que se reciben en materia económica, los agricultores a menudo son los más perjudicados por una política de precios que se ha venido a denominar como capitalismo salvaje y que hace que muchas veces se beneficien más aquellos que en realidad han trabajado menos, pues los intermediarios no son quienes pasan meses cuidando los árboles y cultivando el terreno en espera de que la cosecha sea buena, ni quienes tienen que afrontar las pérdidas producidas por plagas o la mala climatología. Vender el producto directamente al consumidor final permite a aquellas personas que se han esmerado de verdad por conseguir un buen producto a conseguir un precio justo por él y además enviarlo con la plena satisfacción del trabajo bien hecho.
Aunque solo nos hemos centrado en un solo alimento como son las naranjas, lo cierto es que cada vez son más las posibilidades que ofrece la red a la hora de comprar, y eso a su vez nos está haciendo compradores más eficaces y exigentes, capaces de encontrar algo más que un buen precio por un producto, sino primando también la calidad.