Descubre cómo hacer la sangría perfecta y disfruta este verano de la bebida casera tradicional para combatir el calor que nunca pasa de moda. Es un clásico de las barbacoas estivales, las excursiones y las verbenas rurales. Cualquier ocasión es apropiada para sacar una jarra de sangría casera y servir unos vasos a la familia o a los amigos: esa comida o cena en el jardín que reúne a todos, el tardeo en la piscina, la sobremesa que se alarga durante horas o el aperitivo en casa. Y, por supuesto, las fiestas.
Cómo hacer la sangría perfecta para este verano
La sangría es una combinación de fruta fresca macerada en vino tinto azucarado, que puede estar enriquecido con algún otro licor, bebidas con gas o especias. Aquí te contamos cómo hacer la sangría perfecta para lograr el mejor sabor. Para su elaboración puedes comprar naranjas de Valencia en naranjastradicionales.es y darle el sabor que merece.
Reúne todos los ingredientes para elaborar dos jarras de la sangría perfecta
- 1 y 1/2 litro de vino tinto (2 botellas de 75cl)
- 200 ml de gaseosa
- 3 naranjas
- un limón
- 2 melocotones
- una manzana
- una copa de licor de naranja, cointreau, triple sec o grand marnier
- 6 cucharadas de azúcar
- una ramita de canela
Prepara la fruta para hacer sangría
Lava y seca el limón y las naranjas. Deja dos naranjas y la otra córtala en ruedas más bien finas, al igual que el limón.
Pela los melocotones y retira el hueso y pela la manzana y descorazona. Corta en dados no muy pequeños estas frutas, para que al beber se puedan tomar o no según quiera cada uno.
Pon toda la fruta en dos jarras o en una ponchera, una cazuela o un cuenco grande.
Elabora los líquidos para preparar sangría
Exprime las dos naranjas reservadas y diluye el azúcar en su zumo, si es necesario ponlas en un cazo al fuego para que sea más rápido. Vierte la mezcla sobre la fruta, añade la copa de licor y la canela en rama.
Prepara la piel de la naranja
Saca la piel limpia de las naranjas que has exprimido. Usa un cuchillo de cocina afilado para sacar las tiras largas de piel sin nada de la parte blanca que está bajo ella. Añádelo al recipiente en el que estás preparando la sangría.
Deja macerar el conjunto para lograr una sangría perfecta
Mezcla bien todos los ingredientes y deja macerar dando tiempo a que reposen junto. Lo puedes guardar en la nevera o no, según te convenga.
Da el toque final a tu receta de sangría
Cuando vayas a servir la sangría añade la gaseosa o el agua con gas. Si lo haces antes, perderá ese toque de burbujas. Añade también los cubitos de hielo, porque la sangría perfecta se sirve muy fría.
Cómo hacer la sangría perfecta: los trucos que debes conocer
Elige fruta fresca
Olvídate de enlatados, conservas, refrescos de naranja o melocotón en almíbar. La fruta fresca le da otra gracia a la sangría, así que no busques atajos en este sentido.
Maceración y reposo, claves para hacer la sangría perfecta
Uno de los trucos para hacer una sangría perfecta es el macerado. Es cierto que lo puedes hacer y servir, pero para que se tomen bien los sabores y la sangría esté en su punto óptimo todos ellos deben permanecer juntos al menos un par de horas. Aunque lo ideal es hacerlo con paciencia de un día para el siguiente.
Haz los mejores cubitos para sangría
Como seguro que ya sabes, los clásicos cubitos de hielo hechos con agua cuando se van derritiendo se diluyen en la bebida que están enfriando. Esto hace que al servir los últimos vasos la bebida no sea igual de rica que al principio.
Para evitar aguar la sangría te damos un truco: pon un dado de melocotón, naranja o limón en cada hueco de la cubitera y rellena con una mezcla a partes iguales de zumo de naranja y vino tinto. Guarda en el congelador hasta que estén sólidos. Y usa estos cubitos para mantener fría la sangría. Así, aunque se vaya diluyendo, mantendrá mejor el sabor.
Licor en la sangría, ¿si o no?
No es imprescindible para la sangría, pero si buscas la receta perfecta, elige un licor de naranja, ya sea casero o de una marca comercial. Los tradicionales para preparar cócteles como el Cointreau, el Triple Sec o el Grand Marnier o el Curasao son una buena elección.
